La impresión directa se compone de varias fases y la imprimación es una parte esencial en este proceso. La imprimación es un tratamiento químico que se aplica a la prenda antes de la impresión directa con el objetivo de garantizar la durabilidad de la impresión.

La función esencial de la imprimación es facilitar la interacción perfecta entre el pretratamiento, la prenda y las tintas. El pretratamiento debe penetrar en la prenda, y las tintas deben adherirse al pretratamiento formándose una unión entre ambas sustancias químicas y convirtiéndolas en una estructura única que sea suficientemente duradera para soportar el estiramiento del tejido, los múltiples ciclos de lavado a máquina, y el desgaste diario de la prenda al ser utilizada por el usuario.

La segunda función de la imprimación es proporcionar la base en la que proyectar las tintas. La impresora de camisetas aplica las tintas en forma de microgotas minúsculas (contabilizables en Picolitros), y en estas circunstancias la uniformidad de la superficie de aplicación es muy importante. La base actúa como barrera para evitar que las minúsculas gotas de tinta se deslicen dentro de la estructura natural del tejido de la prenda y desaparezcan los detalles de la imagen impresa. Sin esta barrera sería imposible trasladar detalles pequeños (por ejemplo, un texto de tamaño pequeño sería ilegible) y no se podría crear zonas grandes de un solo color con aspecto uniforme.

En la actualidad existen tres métodos de aplicación del pretratamiento:

• El indirecto: o aplicación manual en forma de spray
• El semi-automático: fuera de la línea de producción
• El automático: totalmente integrado en el proceso de producción

El pretratamiento indirecto o manual es el método tradicional de aplicación de la imprimación, y se realiza sobre la prenda antes de colocarla en la impresora de camisetas. El proceso es el siguiente: en primer lugar, la prenda se debe planchar en una plancha transfer durante unos segundos para eliminar la humedad que pueda haber, después se retira la prenda de la plancha y se le aplica la sustancia química de pretratamiento pulverizándola sobre la prenda mediante una pistola de pulverizar.

El pretratamiento se debe pulverizar uniformemente sobre el área imprimible, donde seguidamente se pasará un rodillo para asegurar su distribución. A continuación, se vuelve a planchar la prenda para secar el producto. La aplicación uniforme y correcta del pretratamiento garantiza la durabilidad del diseño frente a los lavados.

En el sistema de pretratamiento semi-automático, después de planchar la prenda esta se coloca en la máquina de pretratamiento y de modo automático la prenda avanzará pasando por debajo del dispositivo de pulverización de pretratamiento, que se aplica sobre toda la superficie frontal de la camiseta. La prenda se extrae y todavía mojada, se plancha en una plancha transfer para garantizar la fijación. A continuación la prenda pasa a la impresora de camisetas. Este método garantiza una aplicación más uniforme, pero requiere mayor inversión al tener que comprar una máquina destinada exclusivamente a esta finalidad.

El método automático consiste en la aplicación del pretratamiento directamente sobre la prenda ya colocada en la impresora directa, pero solo está disponible en impresoras directas de uso industrial. De este modo se ahorra en coste de mano de obra porque el pretratamiento se aplica en la cantidad adecuada y directamente sobre la prenda ya colocada en la impresora, antes de realizar la impresión.

Para el pequeño empresario dedicado a la personalización de camisetas mediante impresión directa, el método tradicional de aplicación del pretratamiento con un pulverizador doméstico puede suponer inicialmente una dificultad, ya que se realiza totalmente a mano. Es imposible garantizar la aplicación correcta del pretratamiento, pero se ganará experiencia con el paso del tiempo.

No obstante, habrá que repercutir este coste adicional de mano de obra al precio de venta de cada camiseta o reducir el beneficio generado por la venta de cada camiseta. Es importante señalar que si se realiza el pretratamiento con mucha antelación, la humedad acumulada en la prenda pretratada puede cambiar de la primera a la última camiseta, y el resultado final no sería uniforme. Esta variación en la humedad puede ser debido a:

• El modo en que se amontonan las camisetas después del pretratamiento
• El tiempo transcurrido desde el pretratamiento hasta la impresión
• la cantidad de pretratamiento

La práctica del operario conseguirá salvar todas estas dificultades para conseguir un resultado uniforme.

La impresión directa es una técnica en constante evolución y del mismo modo, se producirán avances en el pretratamiento. Posiblemente, la evolución del pretratamiento consistirá en un método de aplicación directa más localizada (posiblemente aplicando un papel con el pretratamiento), con la forma del diseño de modo que no se desperdicie el producto y no se produzca ninguna alteración química.

¿Cuál es tu experiencia en la imprimación? ¿Cómo ves tú la evolución futura del pretratamiento? 

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